Nació cerca del potrero
Donde no había ni un caballo
Recibió la luz del cielo
Con relámpagos y rayos
Él no conoció la escuela
Donde fueron sus hermanos
Porque él ya tenía la fuerza
En el puño de sus manos
Un hermano de su padre, boxeador ya retirado
Le regaló el par de guantes
Con los que él había ganado
Y no le quedaron grandes
Cuando tumbó al "Diablo Vega"
El campeón de todo el barrio
Llegó a ser campeón del mundo
No había quién se le enfrentara
Hasta que llegó un valiente
Y peleó en Guadalajara
Salió a ganar como siempre
Desde la primer campana
Le pegó hasta que la muerte
Se le dibujó en la cara
Él lloró con la victoria
Y maldijo su destino
Porque conquistó la gloria
Pero se sintió asesino
Después aventó los guantes
Y se salió de las cuerdas
A buscar cualquier camino