"Dedico esta canción a todas esas personas desinteresadas empeñadas en la ardua tarea de preservar nuestra moral accidental y cristiana"
Y todas las mañanas Inocencia
Se pone el vestidito de organdí
Su mamita la peina con dos trenzas
Y moñitos de gasa y plumetí
En la plaza todos los nenes juegan
A la mancha, sube y baja, y qué sé yo
Mientras Inocencia se queda sentadita
Sobre un banco sombreado en un rincón
Si salta se le arruga el vestidito
Ni que hablar de gritar o de correr
Si legara a ensuciarse los moñitos
En penitencia la habrían de poner
A la escondida no, dice mamita
Pues en sitios ocultos y alejados
Nunca se sabe qué le mostrarían
A la pobre nena todos esos degenerados
De mármol, desnuda y tentadora
En la plaza moraba una muchacha
Mamita protestó y, en pocas horas
La estatua tuvo su bombacha
Y así la vida pasa sin sorpresas
Inocencia acompaña a su mamita
Cuando sale a ejercer beneficencia
O a las casas de la tía de visita
Qué tiene que Inocencia haya cumplido
Ciento setenta y un poquito más
Si da gusto verla con su vestidito
Su cofia, su muñeca y su mamá
Si alguien quiere saber de qué se trata
Preguntarle quién es, y adónde va
Que se le acerque al banco de la plaza
"Yo, Argertina, Señor". Contestará