Los años pasan, sí,
la vida no;
el mundo estalla hermoso alrededor.
Si el corazón mortal
me deja de latir,
en ese instante hay quien saltó a vivir.
Los años pasan, sí,
el fuego no:
el fuego volverá en los hijos del sol.
Si el pecho se apagó, por un soplo senil,
el gran incendio acudirá en cien mil.
Hay quien precisa una canción de amor;
hay quien precisa un canto de amistad;
hay quien precisa remontarse al sol
para cantar la mayor libertad.
Hay quien precisa una canción de paz;
hay quien precisa el canto de un fusil;
hay quien precisa una evidencia más
para tener la razón de vivir.
....
Los años pasan, sí,
lo bello está;
lo bello está invitando a irlo a tomar.
Si el sueño envejeció,
fue triste para él:
lo bello nunca más será de aquel.